Aunque no tenemos pruebas la mayoría tenemos claro que la gran diferencia actual entre el PP y el PSOE es que al PP le conocemos la contabilidad B y al PSOE no. Por otro lado también nos hemos dado cuenta de que el grado de corrupción de un partido político es directamente proporcional al acceso que ha tenido al poder. Quedan partidos pequeños que por su lejanía de los núcleos de poder han permanecido incorruptos. Estos partidos se han vuelto muy útiles, pues han puesto sus estructuras al servicio de la protesta y no nos ha costado nada ponernos a su lado y levantar el brazo con ellos contra la chusma dominante. Perfectos contra el poder, pero, seamos sinceros, no son partidos de masas ni alternativas reales de cambio, suelen proponer cambios radicales de modelo social, cuando lo que queremos simplemente es que se devuelva el estado que han robado a sus legítimos dueños: el pueblo.
Parece que todo el mundo se pregunta por qué con todo lo que está sucediendo no hay una revolución social, y la respuesta es muy clara, sabemos donde no queremos estar, pero no a donde queremos ir. La idea de echar al PP es clara, pero implica un: Vale, y a quién ponemos, ¿al PSOE? Y ahí nos encallamos ¿La misma élite, pero de otro color? No, gracias.
El gran problema de esta democracia es sistémico. Si tu participas en una carrera donde todos van dopados, o te dopas o mejor que no participes porque no vas a ganar nunca. Si no te corrompes no podrás organizar tantos eventos, ni colgar tantos carteles como tus contrincantes y no podrás ganar. Pero al aceptar esta lógica aceptamos que la diferencia entre ganar y perder estará siempre en la capacidad para corromperse y no en las virtudes políticas.
Podemos salir todos a la calle, concentrarnos en las sedes del PP y no parar hasta que se vayan, y luego qué. Yo tengo otra propuesta y es de urgencia por que esta gentuza se ha dado cuenta de lo que está sucediendo y están en plan: coge el dinero y corre, aguantando todo lo que puedan y llenándose los bolsillos cual bandidos en la cueva del tesoro a punto de derrumbarse.
La idea es crear una formación política de usar y tirar. Sería encabezada por personajes públicos de honradez contrastada y libres de afiliaciones políticas. Su misión sería llegar al poder y convocar un referéndum para cambiar la constitución, si se gana aplicar los cambios y desaparecer y si se pierde desaparecer directamente.
Los cambios a grandes rasgos serían estos.
Separación de poderes: Es una barbaridad democrática que los miembros de los órganos rectores de los estamentos judiciales sean elegidos por los partidos políticos. Esto tiene que cambiar.
Transparencia absoluta en las cuentas públicas y las empresas participadas o con convenios exclusivos: Todas las contabilidades de todas las administraciones y de las empresas con participación pública o las que se financien con dinero público deben tener su contabilidad en línea para ser consultada fácilmente por quien lo desee.
Posibilidad de revocatorias: Si se juntan las firmas equivalentes al 50% del número de votos con el que el partido que gobierna ganó las elecciones, por ley, hay que organizar un referéndum de revocación.
Incompatibilidades que se alarguen diez años después de dejar el cargo: La ley de incompatibilidades se tiene que alargar diez años para asegurarse que los políticos no reciben el pago de sus favores en forma de un puesto directivo en alguna empresa que han beneficiado una vez terminen el mandato.
Todas la ILP´s se convertirán por ley en referéndum de obligado cumplimiento: Nada que explicar, así de simple. Lo único es que las leyes no podrán vulnerar los derechos fundamentales descritos en la constitución.
Ley de partidos que impida que estos se financien con donaciones: Ni anónimas ni públicas ni créditos condonados, un partido político sólo se puede financiar a través de las subvenciones y de las cuotas de sus afiliados y, en base al punto dos, tener todas las cuentas en línea.
La figura de defensor del pueblo debe ser electa y dotada de poderes: El defensor del pueblo debe ser un cargo electo y no renovable. Debe tener un presupuesto asignado por ley y bajo su mando se creará un juzgado independiente que pueda investigar a toda la función publica, incluido empresas concertadas, participadas, funcionarios y políticos. Este juzgado debe estar bien dotado y debe investigar no sólo bajo denuncia si no también por sospecha y de forma aleatoria. De la misma manera que actúa hacienda o tráfico.
Y ya, con esto me conformo. Yo, como individuo tengo una ideología, que es la mía y que implica muchos más cambios, pero ideología cada uno tiene la suya y aquí no quiero hablar de eso. Esto que propongo es higiene democrática con la que todos los que no tenemos acceso al cajón del poder, seamos de izquierdas, de derechas o de otro lado, estaremos de acuerdo.
Es una cuestión de cuales son las normas del juego y no de quien gana y que hace cuando gana. Existen unos cuantos problemas, por ejemplo quien gobernará y tomará las decisiones mientras todo este proceso sucede, que aunque se haga rápido llevará un tiempo. Bélgica nos ha demostrado que un estado puede funcionar mucho tiempo sin políticos al mando, pero esto es algo que debemos debatir.
Para que esto siga hacia adelante debería ser asumido por la sociedad civil, por el mayor numero de organizaciones posibles, hasta que los partidos se vean obligados a recogerlo también. Propongo que los diputados que podrían salir elegidos, en caso de no obtener la fuerza necesaria para realizar los cambios, juren el cargo, renuncien a su sueldo y no vuelvan a aparecer por el congreso si no es para realizar estos cambios. Es por esto que necesitamos juntar una lista de personas en la que podamos confiar y que no tengan aspiraciones políticas, no sea que se nos cambien de chaqueta una vez accedan al hemiciclo.
Este texto es a mi parecer, una propuesta de mínimos. Uno puede tener la tentación de añadir más cosas a la lista: ley electoral, ley que garantice la independencia de los medios de comunicación, cuestiones sociales, de sanidad, salarios mínimos, etc., pero creo que cuantas más cosas añadamos más complicamos el proceso de consensuar una fuerza capaz de producir esta transición. Con estas simples normas se garantiza una limpieza democrática que hará que todas las demás cosas sucedan, si es que el pueblo quiere que sucedan.
Yo hago mi propuesta desde la soledad, y respaldada sólo por mi capacidad de razonar, con la soberbia de considerarlo un granito de arena que arroje un poco juicio a todo lo que está sucediendo. Desde mi aislamiento no tengo capacidad organizativa y no propongo nombres ni digo como. Sólo espero y deseo que alguien lo recoja y haga algo con ello, que no lo convierta en algo personalista y que respete la idea de consenso para llegar a una democracia de verdad donde los políticos trabajen sólo para quien les vota.
Vicens Jordana
20 de julio de 2013
Chaval… lo flipas si crees que alguien se te va apuntar a esto. En este país de mierda cada uno va a lo suyo y le importan un pedo los demás. No hace falta ser muy listo para darse cuenta de que con esos 6 puntitos cambiaría toda nuestra sociedad. Y claro que son asumibles por cualquiera… siempre y cuando ese cualquiera renuncie a aprovecharse de la crisis política para autopromocionarse, cosa que en este pais de mierda no haría nadie. Aquí, desde el más anticapitalista de los anticapitalista hasta el más derechon de los derechones ven la desgracia agena como una oportunidad única para vender sus ideales. Si te crees que van a renunciar a esta oportunidad, vas listo.
A demás si esto funcionara, para que querrían el poder, ni podrían llenarse los bolsillos, ni tendrían un poder real.
no hago ningún apunte, que los tengo, por que no creo que esto prospere (cerradme la boca, porfavor)pero si más gente dice algo, ya me liaré dar mi opinión.
Me gustan tus textos, piensas, por eso te voy a ir metiedo caña, jajaja, no te lo tomes a mal.